Elsa y David, amor bajo la lluvia

Hoy os traemos la historia de Elsa y David, una pareja que no olvidaremos nunca porque nos transmitió su amor y su confianza, una pareja que disfrutó al máximo de todos los minutos de su boda y que superó todos los inconvenientes, hasta la lluvia torrencial que caía ese día en Martimporra, en el Palacio del Marqués de Casa Estrada donde se celebraba la boda, ya lo dicen ... novia mojada novia afortunada.

Comenzaba la tarde con los preparativos de Elsa, en la alcoba del Palacio, el equipo de peluquería y maquillaje de Llongueras, trabajaba en el estilismo de Elsa y de su madre y hermana. Todas guapísimas con tocados de Burlesca.

Y se desvelaba el secreto del vestido de Elsa, qué decir de las manos de Nicolas Costura, una maravilla de creación que escondía una capa integrada en la espalda que desplegaría después de la ceremonia y como complemento el ramo de Pando Floristas que incluía una variedad de flor que creía en la finca familiar...

Prepararse en el mismo lugar de la ceremonia, es una gran ventaja para la novia, llegaba el momento de salir del Palacio hacia la ceremonia, y todo nuestro equipo lo tenía coordinado y organizado para que en cada momento fuera todo perfecto!

Los gaiteros abrirán camino y Elsa del brazo de su madre, bajaba las escaleras hacia el altar donde David, nervioso, escuchaba la melodía del Vintage Jazz que le avisaba del gran momento que estaba viviendo.

La ceremonia oficiada por Javi de Liebling, incluía momentos muy especiales como ese que veíamos entrelazando sus manos con cintas, y momentos muy divertidos que arrancaban sonrisas, y momentos emotivos como las palabras de amor que ambos, Elsa y David se dedicaron.

Tras la ceremonia, unas fotos por la finca, más verde que nunca porque ya se sabe que en Asturias la lluvia abunda y los helechos crecen salvajes.

Y a disfrutar del aperitivo que Sol Gimeno había preparado al ritmo del mejor jazz, todo ello bajo la carpa que habíamos instalado en los jardines.

Tras el aperitivo entraban en el Palacio para disfrutar de la cena, los salones del Palacio guardan muchos secretos, y en entre ellos la decoración de micro bombillas en las vigas de madera que aportan luz y calidez.